-VUELO HACIA ALGUN LUGAR DE MIS DIAS PASADOS.-

-Roger Waters 17/03/2007-

Desde muy pequeño y a lo largo de mi vida siempre tuve una fascinación por lo viajes temporales. Sí, viajar en el tiempo, es decir ocupar un mismo espacio pero en otra época, en otros años, en otros días. Cuando tenía unos siete u ocho años me mataba con la serie "El Túnel del Tiempo" donde los pobres Douglas Phillips y Anthony Newman se la pasaban de viaje en viaje por todas las épocas y civilizaciones sin poder regresar. Realmente eran unos "ídolos" y la pasaban mal "estos tíos", pero a mi me encantaban.
Con el transcurso de los años fue creciendo y haciéndose carne en mi la teoría que los sentidos que mejor te transportan a esos viajes cerebrales son fundamentalmente: el gusto y el olfato, en cambio la visión es quien más te ata al presente, a la realidad diaria, aunque a veces puede funcionar como tal, pero en raras excepciones y por un lapso fugaz de tiempo.
Por suerte, una de esas raras experiencias visuales, la única que me llevó durante más de tres horas a un estado mental de exploración de mi infancia y adolescencia a lo largo de mi vida, fue causado por el acorazado multimedia del Maestro Jedi Roger "Ovi Wan" Waters junto a todos sus increíbles discípulos, y sus múltiples efectos de luces, magia, sonido, algo así como un soundstrak psicodélico que no para nunca y entonces es imposible desconectarse, como si cada uno de nosotros fuéramos pequeños "Neo’s" y no lográramos desconectarnos entre tema y tema de la Matrix.
Así, desde el comienzo atronador de "In the Flesh", pasando por la sentida y bella "Mother" las lágrimas comenzaban a humedecer los ojos, los labios se secaban y las palabras salían de la boca como por arte de magia. Mientras las diapositivas de mi vida pasaban, en un doble efecto visual, uno y externo: lo que veía y oía en el escenario, descomunal, y otro interno lo que "veía" en mi mente: "chiquito sentado en el sofá con la tapa del vinilo del álbum "El Lado Oscuro de la Luna" y mi vieja que me llamaba a almorzar.....Animals con el "cerdo volador" y mis ojos grandes que no entendían nada , The Wall y los primeros viajes románticos sentimentales, The Final Cut y el bajoneo absoluto post Malvinas...... Syd Barret and The Pipper at the Gates......y el arco iris de colores......A Saurceful of Secrets y mis amigos del barrio Dani y Sergio, todos entre almohadones intentando "interpretar" los senderos sónicos.
No sigo más... no puedo!, no se más que decir y no me quiero repetir con adjetivos calificativos, sigan Uds. por favor en lo comentarios del blog, hoy les pido una mano realmente, ya que no se si estoy exagerando, posiblemente sí, es más quizás sigo soñando, sigo viajando incandecentemente hacia las tierras de Ummagumma, hacia un abrazo fraternal con Syd.........y seguramente con un guiño de ojos de Lennon, que con su acústica y bajo la copa de un frondoso árbol algo estará planeando.......Por último: que gran versión "Set the Control for the Heart of the Sun"!! no me la esperaba, sonó increíble!......y Ahora sí, como dice mi amigo Gustavo, para los que tenemos más de 35 y son fans de la vieja serie "Star Treek", el broche de oro hubiera sido cuando terminó el show usar la vieja frase de la serie: - Comandante Kirk a Puente....por favor Scotie Transportenos a la Enterprise - ....y del Monumental apareces en dos segundos en tu casa para irte a dormir previo saborear un buen cafecito, mientras la genial calesita sicodélica del Maestro Waters no deja que cierres la mente.