sábado, 9 de agosto de 2008

LA MASCARA Y EL ESPEJO DE AGUA CLARA


Frente a Frente.
Nos fulminamos con la mirada.
Intensidad centellante. Fuego Amigo.

Ahí estabamos otra vez él y yo, a un metro, ¿qué digo?...a centimetros de distancia..¿cuántos: 80 cm...60 cm? que más da!. Como tantas otras veces ahí estabamos cruzándonos nuestras miradas casi felinas, extorsionándonos el pestaneo. Vi en sus ojos el brillo de los míos. Me vi dentro de sus pupilas distantes y tan extrañamente cercanas al mismo tiempo. Después de ese eterno instante... de esa pequeña gran explosión, apenas me sonreí como diciéndole "no tenes verguenza", y él respondió con el mismo gesto, no se si sobrador o dándome lástima. Más de mil veces nos encontramos en la misma situación, en su mayoría con buena onda porque siempre existió un enorme amor entre nosotros, y coincidencias a mares. Pero esta vez era distinto.
Lo busqué a gritos y apareció en la habitación de siempre, la que nos resultó tan cotidiana y familiar. Así es, esta vez era diferente. Quería una respuesta urgente y precisa, porque yo no la tenía. Entonces actué.

Saqué mi mano del bolsillo derecho del pantalón y mientras comencé a arreglar mi corbata desajustándola, sentía me asfixiaba, le grité en la cara con bronca:

- ¡¡¿¿Cómo Carajo pudiste hacerlo??!!
- ¡¡¿¿Cómo mierda pudiste??!!

Sentí la transpiración constante. El sudor me invadía toda la cara y el cuerpo. Volví a sentír odio hacia áquel hombre que a la vez tanto me fascinaba.
El silencio más absoluto. Sólo me miraba tanto o más como yo le miraba. Tan sólo eso: silencio, vació. Ausencia absoluta de palabra. La nada.
Y cargué nuevamente con mayor furia aún, con el rostro crispado y enrojecido, la voz aún más grave, exigiendo una respuesta, o aunque sea una pequeña alternativa a mi única voz flotando en el espacio:

- Pero decime: ¿¿cómo pudo ser?!!! Siempre estuviste en una posición distinta y lo fundamentabas!!! Lo sé y lo sentí...de memoria...¡¡¡Que diablos te llevo a actuar de ese modo!!!

Apenas terminaban mis palabras, mis ojos y los suyos estaban llenos de lágrimas. Cascadas bipolares. Sentía las mías, observaba las de él. Daños Colaterales.
Ambos hicimos el mismo ademán: sacamos el pañuelo y nos secamos los ojos y las mejillas, mientras seguiamos mirándonos sin comprender nada. Los grillos afuera eran música de fondo de una patética escena sin orquesta alguna.
El silencio lo gobernaba todo.
Mi respiración profunda evitaba que mi nariz comenzara a gotear agua, tan incómoda para sostener una conversación que no existía.
Ya con las pocas fuerzas que me quedaban y en un tono casi amistoso le dije:

- ¿Por qué carajo actuaste tan contradictoriamente a tus pensamientos, a tus dichos desde siempre?.
- Sólo decime eso: ¿¿Por Qué??

- Nada más, tan sólo eso te pido...
(en un tono casi inaudible)


El agotamiento había hecho estragos conmigo...y él estaba igual, lo podía observar: angustiado, cansado, sin respuestas, dolido...Confundido, sí eso, ambos estabamos así.
Eramos tan iguales como tan diferentes...Nos conocíamos y también nos des-conocíamos a menudo. Encuentros-Des-encuentros. Crisis. Nuestros ojos de inviernos lluviosos volvieron a cruzarse. Comprendí: El silencio era el único sendero bosquejando una respuesta en el eter.
Ambos nos ajustamos bien el nudo de la corbata y nos pusimos el hermoso saco gris obscuro de estreno.
Con la mano derecha nos peinamos el cabello que nos caía sobre la frente.
Nos miramos por última vez profundamente como si nos conociésemos de siempre.
Apagué la luz de mi habitación y cerré la puerta.
Nos fuimos juntos, no se adonde ni recuerdo lugar alguno, quizás a la búsqueda de respuestas, de certezas, de convencimientos, a recuperar un poco la dignidad pérdida, mientras el Espejo de mi habitación quedaba tan sólo y obscuro como lo estaba antes de nuestra llegada.

Un Cuento de Darío C. Carzino (para UniversoLimbo.blogspot)


Basado en el bello texto
"AVATARES" escrito en nuestro Blog Amigo: http://fromouttheblue.blogspot.com de obligada lectura para comprender con mayor aproximación las raíces del cuento!

Sin máscaras por favor!! ¡Cuantas veces, en nuestra vida, hemos desconocido nuestras propias acciones! o ¿Somos todos rubios de ojos claros o morochos de ojos verdes? ¡¡Somos tan imperfectos y nos desconocemos tanto que intentamos seguir viendonos perfectos y maravillosos!! Aceptarse tal cual uno es: con imperfecciones, sabiendo de nuestras pocas virtudes y muchos defectos, e intentando siempre maximizar las poquitas cualidades y minimizar los muchitos defectos...HUMILDAD y TEMPLANZA SON NUESTROS ESPEJOS DE AGUAS CLARAS.

..."tu ausencia es presencia absoluta en mis pensamientos...tus silencios son un festival de palabras en mi mente...Sé que tus sueños son los míos aparcando en algún rincón del universo"...(D.C)